sábado, 27 de diciembre de 2008

Pantalones amarillos (2007)


Hay toda una leyenda alrededor de este pantalón amarillo usado en forma inesperada. Fue en la final de la Libertadores 2007 contra Gremio. Semejante peludo se habían comido los garotos en Brandsen 805, que para la revancha y con un 3-0 para remontar empezaron a bandearse a terrenos esotéricos. La leyenda dice que exigieron que para el partido final en Porto Alegre, Boca no usara su camiseta tradicional, aduciendo similtud de colores. Nada que ver. Boca se puso firme y tuvo que transar para cambiar solo los pantalones. Como no tenía juego suplente porque la situación no lo requería, hubo que apelar a unos de emergencia, sin escudo y que correspondían a la equipación de entrenamiento de varios años atrás. Llamativamente la cosa no quedó acá. Tal vez, impulsados por el gran triunfo en las tierras de Pelé, Boca se calzó nuevamente los amarillos en Japón, nada menos que en la semifinal del Mundial de Clubes cuando le ganó al Etoile du Sahel 1-0. ¿No habría que haberlos usado en la final con Milán también?